Desde el momento en que un niño nace, su mundo está lleno de sonidos: el latido del corazón de su madre, el murmullo de las voces familiares y, más adelante, las canciones de cuna que lo calman y lo arrullan.
Desde el momento en que un niño nace, su mundo está lleno de sonidos: el latido del corazón de su madre, el murmullo de las voces familiares y, más adelante, las canciones de cuna que lo calman y lo arrullan.